Lejos del inicio de los noventa, como cuando en Barcelona atajaban tres buenos arqueros (Morales, Mendoza y Cevallos), y luego en Emelec habían dos seleccionados casi fijos (Jacinto Espinoza cuando tenía agilidad y Alex Cevallos), se podría decir que gozábamos de una cierta regularidad o solvencia dentro del arco, llegando a momentos a pensar en tener arqueros de exportación (“Chinto” tapó en Alianza Lima).
Inclusive, los otros equipos contaban con arqueros regulares: Héctor Chiriboga (cuando no era cerdo), “Pancho” Reinoso, Carlos Vallejo (el eterno de todos los equipos manabitas), Carlos Enríquez (el que se mordió la lengua en un partido contra Emelec), Jorge Corozo (retirado en el Ciclón riobambeño) y otros más…
Pensar que todavía algunos de estos arqueros, todavía siguen en vigencia en equipos de la serie B, en vez de dar cabida a jóvenes que seguramente no darán la talla: Robin Pico, Wilman Buele (el suicida del Espoli), Erwin Ramírez (Ok: ese siempre fue malo)…
Sin embargo hoy podemos contar sólo con los arqueros internacionales que han llegado, a la espera del tercero que es Gastón Sessa.
Y en vez de seguir con la palabrería:
Los peores arqueros según el defecto:
Centros (pondríamos a todos):
Cristian Mora: número uno para ocasionar sustos a su propia defensa
Giovanni Camacho: sus malas salidas siempre ocasionaron goles en contra
Daniel Viteri: a cada salida, una oportunidad de gol para el rival
Ubicación:
Rorys Aragón: Landon Donovan y los mexicanos lo demostraron. Eterno suplente en Bélgica
Omar Estrada: muchas veces salido, y tantas veces bañado. Hoy suplente
Daniel Viteri: goles muy estúpidos y previsibles (aunque mejor él, antes que Héctor Rolando Carabalí)
Mano a mano:
Rixon Corozo: es casi imposible fallar ante este golero
Sandro Borja: siempre lo dejan desparramado
Giovanni Ibarra: ya ni eso le queda
Tiros de media distancia:
Diego Espinoza: por eso lo contrataron a Sandro
Francisco Caicedo: más por nervios, aunque antes era peor (por eso preferían ponerlo a Corozão lesionado)
Humberto Pretti: en una noche mojada de Quito lo demostró
Los más oxidados:
José Cevallos: aunque sea un líder de equipo y quizás el mejor arquero ecuatoriano de toda la historia, se ve a leguas que está quemando sus últimos cartuchos (como su suplente Robin Pico)
Jacinto Espinoza: por eso en Ambato. El “Super Chinto” ya perdió sus poderes hace rato
Edwin Villafuerte: está gordo y a pesar de tener condiciones, seguirá comiendo banca en el elenco torero, si deja de estar gordo e irregular
Esperemos que los jóvenes salgan mejores. Aunque el Sudaméricano Sub-17, demostró todo lo contrario.
Bienvenido Gastón Sessa.
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